Existe una amplia variedad de tipos de envases para alimentos, lo cual tiende a generar muchas dudas respecto a la elección adecuada. En este artículo te ayudamos a elegir el embalaje para alimentos que tu empresa necesita.
Existe una amplia variedad de tipos de envases para alimentos, lo cual tiende a generar muchas dudas respecto a la elección adecuada. En este artículo te ayudamos a elegir el embalaje para alimentos que tu empresa necesita.
Los diversos tipos de envases para alimentos permiten seleccionar la mejor alternativa para mantener a este tipo de productos en las mejores condiciones hasta el destino en las góndolas comerciales o la mesa de los consumidores.
Los embalajes para alimentos constituyen uno de los puntos más importantes a considerar por una empresa dedicada a este rubro dado que deben garantizar ciertas condiciones físicas para evitar contaminación.
A continuación podrás conocer los tipos de envases para alimentos más utilizados.
Seguramente constituyan el tipo de empaque más elegido para almacenar alimentos como frutas y verduras, bollería, carnes, entre otros. Pueden ser espumadas, transparentes, pelables, con alta barrera y otras funcionalidades que protegen la mercadería, la mantienen limpia y la resguardan.
Existen diferentes tamaños y formas, incluso algunas pueden fabricarse con tapa para facilitar el traslado y evitar derrames.
Es ideal para almacenar y trasladar líquidos ya que su formato es una bolsa de plástico interior y un envase exterior de cartón que aumenta la protección del producto interno. Muchas de estas bolsas poseen un grifo que facilita la dosificación del líquido.
Las bolsas que se emplean para guardar alimentos pueden tener un solo uso o ser reutilizables. Estas últimas son las más empleadas ya que los consumidores desean cada vez más que las empresas ofrezcan alternativas ecológicas en su packaging.
Las bolsas son los contenedores flexibles por excelencia que promueven un traslado óptimo ya que, en su gran mayoría, suelen tener asas o formatos aptos para ello. Además existen tantos tamaños como colores y pueden ser diseñadas estratégicamente para impulsar una imagen de marca positiva.
Se trata de los empaques rígidos que se conforman por una base y 4 lados. Son fuertes y resistentes para transportar grandes cantidades de alimentos gracias a las ondas y grosores que las constituyen.
Además, son la mejor alternativa a materiales de embalaje que no son sostenibles ya que las cajas tienden a fabricarse mayormente con cartón, el elemento ecológico por excelencia.
Los film son un elemento extra a la protección de alimento ya que pueden acompañar bandejas, cajas, botes de plástico, etcétera. Aunque también pueden utilizarse de manera exclusiva para envolver alimentos.
Se trata de una capa plástica, muy delgada pero resistente que puede tener diferentes grosores.
En el caso del film estirable, cumple con resistencia a la tracción, alcanzando grandes posibilidades de estiramiento siendo empleado principalmente para agrupar varias unidades de envase menores.
Por su parte, el film retráctil se contrae con el calor permitiendo la inmovilización de los contenidos. Esto los compacta y une para facilitar su agrupación y traslado.
Este embalaje para alimento está conformado por un film con una soldadura longitudinal y dos transversales, creando un empaque perfectamente sellado.
¿Conoces la diferencia entre envase y embalaje? Te lo explicamos
Podemos clasificar los tipos de envases para alimentos contemplando el material con el cual se fabrican. Ellos son:
Los tipos de envases para alimentos también se clasifican de acuerdo a las técnicas empleadas para cerrar y proteger a los productos en su interior.
El objetivo de esta técnica es la protección del producto frente a posibles contactos externos que pudieran contaminarlo. Es la más empleada para productos sumamente variables como especias, arroz o café.
Gracias a esta técnica de cerramiento se bloquea el aire que rodea al producto, reduciendo sustancialmente la proliferación de microorganismos. Se utiliza en alimentos frescos como carnes, pescados, verduras y frutas, quesos, etcétera.
Retractilado: todo lo que necesitas saber
Es un envasado simple extensible y autoadhesivo que envuelve al producto, en general, a una bandeja plástica. Con esta técnica se impide la desecación aunque no se garantiza el crecimiento microbiano.
Este envasado sustituye el aire que envuelve un producto por un gas o mezcla de gases, que suelen ser nitrógeno, oxígeno y dióxido de carbono. Su principal característica es que la mezcla de gases o el gas no se mantienen constantes, sino que varían.
Es similar al envasado anterior ya que el alimento está rodeado de una atmósfera gaseosa interna que se mantiene estable hasta que el producto se abra. Su composición suele incluir nitrógeno y dióxido de carbono.
Los diferentes tipos de envases para alimentos y las instalaciones donde son fabricados deben cumplir con normativas que aseguren seguridad e higiene y eviten posibles contaminaciones.
Algunos de los requisitos más importantes son:
En Let's Pack te asesoramos para que puedas elegir la mejor opción entre los diversos tipos de envases para alimentos. ¡Contacta con nosotros! Además, contamos con la innovación que hemos generado desde el Grupo Hinojosa.