¿Qué es el embalaje? Pasos para el embalaje de un producto

Descubre en este artículo qué es el embalaje, cuál es su funcionalidad y los diversos materiales con los cuales puede ser confeccionado.

Qué es el embalaje: diferencias con el envase

Si te preguntas qué es el embalaje, debes saber que comúnmente este término se utiliza para hablar del dispositivo de cartón, madera, papel u otro material que resguarda un elemento en su interior y que debe ser trasladado a un punto en particular.

Sin embargo, la realidad es que el concepto de embalaje es más amplio ya que hace referencia a todo el proceso que se realiza para empaquetar un producto y que consiste en diferentes etapas, dando como resultado final la protección de la mercancía empaquetada.

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Para garantizar que este proceso sea efectivo, es importante considerar 3 factores clave:

1. El peso del producto ya que contando con este dato es más sencillo seleccionar el material y empaque adecuado que sea capaz de soportar dicho peso y evitar accidentes habituales durante el traslado.
2. El formato del producto para que la mercancía se adecúe perfectamente al envase y facilite el transporte. 
3. La fragilidad del producto ya que nos permite conocer sus características específicas y cómo cuidarlo de posibles alteraciones. Mediante esta información, podremos elegir de manera inteligente los materiales correctos para resguardar satisfactoriamente al producto.

En general, el proceso de embalaje cumple con pasos comunes que realizan las empresas para empaquetar sus productos. Encontramos excepciones, como por ejemplo, equipos médicos y algunos artefactos de alta tecnología, que no sólo requieren de un buen sistema de embalaje sino de temperaturas adecuadas para su traslado.

Veamos el proceso habitual de embalaje:

1. Se envuelve el producto con papel o material flexible que puede ser cartón o plástico, como primera instancia de protección frente a golpes o agentes externos que pudieran causar algún daño, por ejemplo: la humedad.
2. Se incorpora material de relleno en el paquete o caja seleccionada con el objetivo de resistir golpes y malas manipulaciones durante el almacenamiento y transporte. Existen diversas opciones para relleno: espuma, plástico burbuja, papel kraft, etcétera.
3. Se realiza el sellado y etiquetado del empaque utilizando productos de cierre de excelente calidad como cinta adhesiva para evitar aperturas de la caja. Las etiquetas se colocan para que la logística del transporte sea eficiente y organizada, sea fácil la identificación del producto y llegue a destino de forma correcta.

Como podemos notar, el embalaje tiene sus diferencias con el término “envase”. Éste refiere al paquete que contiene y asegura una mercancía, además de funcionar como una estrategia de marketing para aumentar la reputación de una marca.

Podemos encontrar envases primarios, secundarios y terciarios con diferentes objetivos: el primero está en contacto con el artículo, el segundo puede contener uno o varios envases y el tercero unifica a los anteriores.

Funciones del embalaje

Las empresas líderes que ofrecen productos internacionalmente suelen ser respetadas por aquello que comercializan pero también por todo su sistema de embalaje. 

Hoy, no sólo las grandes compañías destinan tiempo y dinero al embalaje sino aquellas que buscan un reconocimiento de marca, protegiendo sus mercancías y causando impacto positivo entre sus clientes y seguidores.

Para ello, se proponen un proceso de empaquetado eficiente y optimizado, como así también el empleo de materias primas de calidad y respetuosas con el medio ambiente, porque son conscientes que un adecuado proceso de embalaje, relleno y etiquetado constituye parte esencial de la empresa.

Las funciones del embalaje son amplias y variadas:

1. Mediante la elección adecuada del material que constituye al paquete, la inclusión de elementos de relleno y cerramientos de excelente calidad, el embalaje asegura que los artículos comercializados no sufran deterioros durante el almacenamiento o el traslado al sitio de venta destinado.
2. Gracias al empaquetado y etiquetado sistematizado y organizado, se evitan pérdidas de los productos y se garantizan devoluciones rápidas y eficaces. 
3. La elección del paquete correcto favorece la facilidad del transporte, no sólo a nivel operativo sino porque permite un uso eficiente del espacio en el medio de transporte elegido.

Tipos de materiales para embalaje

Ahora que sabes qué es el embalaje, ha llegado el momento de conocer los materiales más utilizados para la herramienta más sobresaliente de todo este proceso de empaquetado: el envase que contiene en su interior al producto que será enviado.

>Embalajes de cartón

Se trata de la materia prima más elegida para confeccionar embalajes dado que es resistente, versátil y ecológica. Este embalaje altamente personalizable y con diferentes tipos de canales es ideal para adaptarse a una amplia variedad de pesos y dimensiones.

>Embalaje de papel

Ideal para enviar libros, documentos o incluso para albergar algunos alimentos de almacenes como frutas y verduras. Es ecológico y ofrece seguridad frente a manchas, humedad, luminosidad, etcétera.

>Embalaje de plástico

Ofrecen gran protección a los productos que albergan aunque suelen ser muy poco amigables con el medioambiente, excepto los plásticos biodegradables. Son ligeros y resistentes, adaptándose a diversos tipos de productos. Podemos hallar contenedores de polietileno, PVC, y polipropileno.

>Embalaje de madera

La madera conforma un material resistente, ideal para envíos pesados que necesitan protección especial. No suele ser muy práctico para envíos cercanos, aunque sí lo es para traslados internacionales o grandes distancias.

Ya sabes qué es el embalaje, solo resta seleccionar un proveedor de empaques que garantice calidad y excelencia en todo el proceso de embalaje que realice tu empresa. 

Paso a paso para el embalaje de un producto

El embalaje es un factor esencial para que la mercancía de una empresa se mantenga en perfecto estado durante toda la cadena de post producción y llegue a manos del cliente o del punto de venta en las mejores condiciones durante su traslado.

Debemos tener en cuenta que, si los productos no son perfectamente protegidos, pueden sufrir daños y perjudicar a la empresa. Por ello, atender a los requisitos de la mercancía y optar por materiales de embalaje de calidad y resistencia es el primer punto a considerar cuando hablamos de empaques.

A la hora de realizar el embalaje de nuestras mercancías debemos seguir ciertos pasos que aseguran una práctica correcta y eficiente. 

>Paso 1: Embalaje exterior

Este tipo de envase protege al producto que se encuentra en su interior, de agentes internos y externos que pudieran perjudicarlo. En general, se trata de cajas de cartón con una extrema calidad y grosor que se corresponde con el contenido interno para protegerlo. El primer paso consiste en ubicar la mercancía o las mercancías en su empaque, el cual fue correctamente seleccionado de acuerdo a las cualidades particulares de las mismas.

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>Paso 2: Elementos de protección

El reto del correcto embalaje de un producto se encuentra en el interior del empaque, donde debe ser protegido frente a posibles daños, temperaturas, roturas, sobrecargas, etcétera. Por ello, los elementos de protección o tipos de relleno son fundamentales ya que protegen, fijan y acolchan la mercancía logrando un empaque compacto y seguro.

Entonces, lo ideal es optar por protectores adecuados y de calidad, y rellenar muy bien los espacios libres entre el producto y la caja externa para lograr una fijación adecuada ya que el producto no debe moverse en el interior. También es necesario elegir aquellos que acolchan y protegen durante el transporte.

>Paso 3: Medios de cierre

Para que la caja externa, la mercancía y todos los elementos de protección constituyan una unidad segura, es necesario utilizar medios de cierre adecuados como son las cintas de embalaje. Existen diferentes opciones: algunas priorizan la resistencia, otras la elasticidad, otras la fuerza o el fácil desenrollado, otras la personalización. 

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La elección dependerá de la cualidad del tipo de embalaje secundario y de las necesidades de la empresa. Independientemente de ello, el cerramiento a través de cintas o flejes es un paso esencial para un correcto embalaje.

>Paso 4: Fijar los palets

El último paso y no menos importante para un óptimo almacenamiento y transporte eficaz, consiste en apilar los empaques en el palet adecuado. No se debe olvidar el envoltorio para que la paletización se conserve en perfecto estado durante el traslado. Para ello se utiliza papel film de calidad y con diversos grosores de acuerdo a los kilogramos de carga que debe soportar el palet.

Buenas prácticas para el embalaje de un producto 

Ahora que ya sabemos qué es el embalaje, debemos conocer que existen algunas buenas prácticas que podemos aplicar al momento de realizar el embalaje de un producto. Te invitamos a conocerlas:

>Escoger correctamente la caja de embalaje

Puede que la práctica más importante sea la elección correcta del empaque para nuestros productos. Y ella se vincula al tipo de material que necesitamos para protegerlos y a sus cualidades específicas. Por ejemplo, no será igual optar por un material de embalaje para una mercancía que necesita protección frente a la humedad que una caja para productos pesados.

Por esta razón, previo a la elección debemos preguntarnos: ¿El contenido del embalaje es pesado o ligero? ¿Se trata de un producto sensible a la temperatura? ¿Es frágil? ¿Se debe embalar una o varias mercancías? Las respuestas nos brindarán conocimientos para elegir el mejor envase para almacenar y transportar nuestros productos.

>Contemplar el objetivo del empaque

De acuerdo al objetivo del embalaje, optaremos por una u otra caja. Es real que todas las mercancías necesitan estar protegidas y llegar al consumidor en buen estado, pero ¿Cuál es el objetivo específico? Si quieres presentar tu producto de forma atractiva seguramente necesites personalizar tu embalaje. Si tu objetivo es vender más, un packaging divertido puede hacer la diferencia. Si solo buscas protección, la mejor inversión será elegir embalajes de alta resistencia y calidad.

>La protección es primordial

Los rellenos o elementos de protección interna, son esenciales en todo embalaje. Una buena práctica es optar por el que mejor conviene a nuestra mercancía: plásticos de burbujas, espumas como el foam, divisores de cartón, film, mallas tubulares, entre otras.

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Asesoría para el embalaje de un producto

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